Tratando el tema de creación de empresa en una clase una estudiante me cuestionaba sobre los ejemplos empresariales que les comentaba, pues, argumentaba que esas empresas tenían muchos recursos humanos, físicos, financieros y tecnológicos para tener el lugar de privilegio que ocupan en el mercado y que para una empresa pequeña era muy difícil sobrevivir en esta época. A lo que respondí con una pregunta “¿usted cree que las empresa que hoy denominamos grandes iniciaron con la abundancia de recursos que menciona?”. Ante este interrogante quiero compartir con ustedes el caso de un emprendedor para que comprueben que hay que cambiar el pensamiento de que no se puede, porque por lo general uno mismo el principal limitante del éxito en cualquier actividad. Hay que combatir ese pensamiento con una frase de la fundadora de la marca body Shop, Anita Roddick “Para tener éxito tienes que creer en algo con tanta pasión que se transforme en realidad”. A continuación uno de esos emprendedores que se apasionaron de su sueño.
Steve Paul Jobs. Actualmente CEO de Apple, empresa que fundó en el año 1976. Su madre, una universitaria soltera, lo entregó en adopción cuando era un bebé a Paul y Clara Jobs. De joven ya era un visionario, que más tarde consiguió concretar sus sueños y modificó sustancialmente la tecnología, comenzando una revolución en el campo de las computadoras personales. Instalada en el garaje de sus padres en solo 10 años se convertiría en una mega empresa de más de 4.000 empleados. En 1991 se casa con Laurene Powell, con quién tuvo cuatro hijos. El destino le juega una mala pasada y se le diagnostica cáncer al páncreas, pero se cura gracias a una cirugía. Cuando cumplió los 30 fue, increíblemente, despedido de Apple, por el actual presidente de la compañía y que había traído Jobs de Pepsi Cola para que lo ayudara en su empeño de desarrollar la empresa. No se quedó quieto y creó los innovadores estudios de animación Pixar con los que produjo la película Toy Story que luego vendió a Disney por una cifra cercana a los U$ 7.400. En 1997 regresó a Apple, la que gracias a su innovación, conduce actualmente. Su sueño llegó a revolucionar la música digital con el IPod que se desarrollo a nivel mundial tal como sucedió con la aparición en el mundo del Wolkman, el ITunes, esta última la tienda de descargadas legales de música más importante del mundo y el Iphone, celular todo en uno.
Este emprendedor propone que “la innovación es lo que diferencia a un líder de sus seguidores” y con seguridad está marcando la pauta en el tema del desarrollo tecnológico. Hace poco hizo una alianza con Nike para que se adicionará a las zapatillas deportivas un Ipod que pudiera monitorear el ejercicio, además, de permitirle al usuario escuchar música. Este año presento en el mercado el macbook air envelope un portátil que pesa menos de un kilogramo y se puede guardar cómodamente en un sobre de manila.
Esta persona que fue dada en adopción a unos padres de escasos recursos, que inició su negocio en el garaje de una casa, que fue despedido de su propia empresa refleja el apasionamiento por un sueño. Sueño que se puede empezar a construir desde las aulas de clase mostrando a los estudiantes la verdadera realidad la que dista al graduarse de tener un puesto con un salario superior a $1.500.000 con secretaria y asistente de cabecera, beneficios como portátil, Blackberry y acción del club pagas por la compañía. Esa realidad propia de una película de ciencia ficción es muy diferente a las innumerables hojas de vida que se deben enviar para optar por un puesto que pudiera no tener ninguna relación con lo estudiado o permitirle ingresos un poco superiores al salario mínimo donde hay que ser “todero” por los mismos “mil pesitos”. Y más grave aún, depender de las ordenes de un pelafustán que a lo mejor ni tiene idea de lo que hace, pero, es el jefe.
Por eso bienvenida la búsqueda de la independencia. Empiece desde ahora no pierda tiempo o piensa que al llegar a la vejez podrá vivir de una pensión que ni le alcanzara para las necesidades básica o peor, ni la podrá disfrutar.